Las gotas caían
Sobre la carne vana
Como perdón inmerecido
Lo seco humectaban
Los puestos vacíos
Las miradas esquivas
Evitando tocarme
Con sus manos lascivas
Nublada la visión
Del caminante en lluvia
De lodo los zapatos
se apresuran a un hundirse
…en cada paso
Me fue negada la sombra
Me secaron la brisa
Los árboles se deshojaron frente a mí
Retractaron su sonrisa
Sigue lo que moja
ya no humecta
Sino que ahoga
lunes, 14 de enero de 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
me encanto tu texto , pero nunca entiendo bien .Mi comprension de lectura es muy bajo
saludos
pd= no se como llegue aqui ,solo el caos lo puede explicar.
Publicar un comentario